Se fue Francisco, el papa que acercó la Iglesia Católica al pueblo: padecimientos físicos y respiratorios mermaron su salud en el último tiempo
Sumo pontífice estuvo a cargo durante 12 años. Abogó por acercar a las diversas religiones del mundo en unidad, atraer a personas de la comunidad LGTBI a la Iglesia y luchó contra los casos de abuso sexual a menores de edad.
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“No puede haber paz sin libertad de religión, libertad de pensamiento, libertad de expresión y respeto por las opiniones de los demás”, fueron las últimas palabras que dio el papa Francisco durante la tradicional bendición “Urbi et Orbi” de Domingo de Resurrección frente a 35 mil almas congregadas en la Plaza de la Basílica de San Pedro. Unas horas después el Vaticano informó que Francisco había fallecido a las 7:35 de la mañana del lunes en el horario de Roma, Italia.
La lamentable noticia del deceso de Jorge Mario Bergoglio conmocionó a todo el mundo. Tras 12 años de haber ejercido como el 266° Papa y máxima autoridad de la Iglesia católica, Francisco abandonó la existencia terrenal a sus 88 años tras sufrir un derrame cerebral que derivó en coma y un colapso cardiovascular irreversible. El hecho fue confirmado por el director de la Dirección de Sanidad e Higiene del Vaticano.
El Sumo Pontífice, quien fue el primer sacerdote de la orden jesuita y sudamericano en ejercer el cargo, ha dejado este plano terrenal luego de padecer en las últimas semanas una serie de afecciones respiratorias que lo mantuvieron internado cerca de 38 días, entre febrero y marzo de este año, a causa de una neumonía bilateral y que mermaron considerablemente su salud, deviniendo en su lamentable fallecimiento.
Francisco, como todo personaje de la historia que marca época, tiene seguidores y fervientes detractores, alguno de estos últimos, como el actual presidente de Argentina, Javier Milei, llegó a calificarlo como el ‘’representante del maligno en la casa de Dios’’ tan solo por haber mostrado una postura –poco habitual en la Iglesia católica– más cercana al progresismo y haber emprendido una serie de reformas en defensa de los más vulnerables del mundo, así como una crítica sobre las políticas ejecutadas por algunos países del primer orden mundial contra otros del ‘tercer mundo’.
Sin embargo, los ataques e injurias en su contra poco o nada importaron a Bergoglio, quien continuó con la misión que sentía Dios le había encomendado, abriendo las puertas de la Iglesia católica a todos, sin distinción de nacionalidad, raza, género e, incluso, religión. Francisco fue considerado como el Papa que acercó la Iglesia católica al pueblo, tratando de paliar esa suerte de divorcio que existe en los últimos años entre las nuevas generaciones y la Santa Sede.
Puentes de credos
Una de sus acciones que marcó un hito y sorprendió a la comunidad religiosa en el mundo fueron sus acercamientos con los máximos líderes de otras religiones como el islam y el judaísmo, históricamente enemistades o, por lo menos distanciadas desde hace mucho.
Así, en 2019, Francisco suscribió un documento sobre la fraternidad humana con el equivalente a su autoridad en el islam, el Gran Imán de Al-Azhar, Ahmed al-Tayeb, promoviendo la paz y la convivencia entre personas de diferentes credos.
Un par de años después, en marzo de 2021, Francisco también se reunió en Irak con el líder religioso chií, el ayatolá Ali Al Sistani. “La importancia de la colaboración y amistad entre las comunidades religiosas para que, cultivando con respeto recíproco el diálogo, se pueda contribuir al bien de Irak, de la región y de la comunidad entera”, señaló el sumo pontífice tras el encuentro que sostuvo con Al Sistani.
Francisco no solo abogó por que se dejara de asociar al islam con ataques terroristas cometidos por musulmanes. “Si hablo de violencia islámica, también tengo que hablar de violencia católica”, dijo. El Papa también condenó los ataques contra el judaísmo y el antisemitismo, aseverando que el odio contra esta comunidad era un “pecado de Dios”.
“Tanto para el judío como para el cristiano, no hay duda de que el amor a Dios y al prójimo resume todos los mandamientos. Por lo tanto, judíos y cristianos deben sentirse hermanos y hermanas, unidos por el mismo Dios”, escribió la máxima autoridad de la Iglesia católica en el prefacio del libro “La Biblia de la Amistad. Pasajes de la Torá / Pentateuco comentadas por judíos y cristianos”.
Francisco también se reunió con los líderes de la comunidad judía en el mundo como el rabino Pinchas Goldschmidt, presidente de la Conferencia de Rabinos Europeos (CER), El Gran Rabino del Reino Unido, Ephraim Mirvis entre otros. Tal es así que organismos como el Congreso Judío Europeo (CJE) extendió sus condolencias a los católicos en el mundo por el deceso del Sumo Pontífice.
“El papa Francisco fue un firme defensor del diálogo interreligioso y del respeto mutuo entre las religiones (…) Su inquebrantable compromiso con la lucha contra el antisemitismo y el fomento de un espíritu de hermandad entre cristianos y judíos será recordado con gratitud y admiración”, manifestó el CJE.
Francisco también tendió puentes con la Iglesia Ortodoxa en un encuentro realizado en La Habana, Cuba. En un hecho sin precedentes, el Papa se reunió en 2016 con el líder de la Iglesia Ortodoxa Rusa, el patriarca Kirill. Este fue el primer encuentro entre un Papa y un patriarca de Moscú desde 1054, cuando ambas iglesias se dividieron. Es decir, hace casi mil años.
Comunión e inclusión
El papa Francisco continuó con su mandato positivamente disruptivo y permitió que los católicos divorciados y, posteriormente vueltos a casar, volvieran a recibir en algunos casos la comunión.
“Aquellos que tras la ruptura de su vínculo matrimonial han establecido una nueva convivencia. (...) Estas personas no están excomulgadas como algunos piensan, ellas forman parte de la Iglesia”, manifestó en 2015. “¿Cómo podríamos aconsejar a estos padres hacer de todo para educar a los hijos a la vida cristiana, dando ellos el ejemplo de una fe convencida y practicada, si los tenemos alejados de la vida de la comunidad como si fueran excomulgados?”, se cuestionó Francisco.
El Papa también abrió las puertas de la Iglesia católica a los homosexuales y la Comunidad LGTBI, mostrándose incluso abierto a la unión civil entre parejas del mismo sexo y autorizando a los sacerdotes a bendecir a estas uniones conyugales, afirmando que estas tienen derecho a formar una familia. No obstante, el Sumo Pontífice también aclaró que las uniones entre personas del mismo sexo no debían considerarse matrimonios. Según dijo, sería “un intento de destruir el plan de Dios”.
Sin embargo, todas estas acciones ya habían despertado las críticas más feroces de los sectores más conservadores del catolicismo, más aún teniendo en cuenta que su predecesor en el Vaticano, el papa Benedicto XVI había considerado abiertamente que las personas homosexuales llevaban un mal intrínseco en ellas.
Abusos sexuales
Uno de los pasivos más pesados que recibió el papa Francisco al asumir como máximo autoridad de la Iglesia Católica en 2013 fue el denario e historial infame de denuncias por pedofilia y abuso sexual de larga data contra diversos sacerdotes, así como las acusaciones contra el Vaticano de encubrir estas atrocidades.
Por tales razones, Francisco adoptó una serie de medidas al respecto como la creación en diciembre de 2014 de un grupo internacional de expertos que tenía como objetivo recomendar cómo defender y proteger a los menores de edad de abusos sexuales.
En 2019 el papa Francisco decidió desaforar al ex cardenal estadounidense Theodore McCarrick tras ser declarado culpable por un tribunal vaticano de abusar sexualmente de un adolescente en la década de 1970. Sobre este mismo caso se emitió, un informe en el año 2020, en el cual se reveló que el papa Juan Pablo II había ignorado los consejos vertidos sobre McCarrick, conocido por haber abusado de seminaristas adultos.
Ese mismo febrero de 2019, el Sumo Pontífice también convocó a los jefes de 114 conferencias episcopales de todo el mundo con el jefe de las iglesias católicas orientales y superiores de congregaciones religiosas para con el fin de atender “la protección de menores de edad”. Este evento tuvo una duración de cuatro días.
En diciembre de ese mismo año, Francisco puso a disposición de los tribunales laicos las denuncias, testimonios y documentos de los juicios internos de la Iglesia católica. Con esta medida, las víctimas de abusos sexuales pudieron acceder a sus expedientes y a cualquier sentencia.
También se estableció la obligatoriedad de denunciar a las autoridades eclesiásticas las sospechas de agresión o acoso sexual, así como cualquier intento de encubrimiento de estos hechos.
Modificó código
Dos años después, en 2021, Bergoglio también impulsó otra reforma en contra de estos abusos y la Iglesia católica actualizó su código penal por primera vez en casi 40 años para incluir una mención explícita a los abusos sexuales cometidos por sacerdotes contra menores de edad y discapacitados.
Sodalicio
El Perú no fue ajeno a estas iniciativas. En enero de este año el papa Francisco ordenó la desactivación del Sodalicio de Vida Cristiana, organización fundada por Luis Fernando Figari en 1971 y acusada de haber perpetrado abusos sexuales a menores de edad durante años.
Según múltiples denunciantes, Figari instauró un sistema de sumisión total al poder del Sodalicio entre sus integrantes, provocando que estos estuvieran expuestos a una serie de prácticas degradantes y abusos psicológicos, físicos y sexuales en su contra.
Sumo pontífice visitó el Perú
Como era de esperarse, uno de los territorios a los que más viajó el papa Francisco, aparte de Europa, fue a su natal Sudamérica.
En uno de esos trayectos, el Sumo Pontífice llegó al Perú el 18 de enero de 2018. En total estuvo tres días en territorio nacional, tiempo en el que se desplazó por Lima, Trujillo y Madre de Dios.
En uno de sus discursos en su visita a Madre de Dios el 19 de enero de ese año, Francisco hizo hincapié en los peligros a los que se encuentran expuestos las comunidades amazónicas con los padecimientos que provocan el derrame de hidrocarburos y la trata de personas. Asimismo, la máxima autoridad eclesiástica también pidió seguir defendiendo a los pueblos indígenas que se encuentran aislados por voluntad propia.
Un día después, el 20 de enero, Francisco se dirigió Trujillo, donde ofreció una misa frente al mar de Huanchacho a donde acudieron cerca de 200 mil personas, quedando una imagen histórica para la posterirdad. Ya el 21 de enero, el Sumo Pontífice regresó a Lima, visitó el Santuario del Señor de los Milagros y tuvo un encuentro con obispos. En aquella ocasión, el máximo representante de la Iglesia católica hizo un llamado desde la capital para que se ejerza una mayor unidad y justicia social.
Mal de salud
A Jorge Bergoglio se le extirpó parte del pulmón en 1957 tras haber sufrido una graves infección respiratoria cuando tenía poco más de 20 años en su natal Argentina. Este hecho marcó un antes y un después en el historial de afecciones respiratorias que sufrió a lo largo de su vida.
Otra recaída
La salud del papa Francisco decayó notoriamente en el último par de años. En 2021 le extirparon parte del intestino grueso tras sufrir un estrechamiento de colon. Asimismo, en el último tiempo, un mal que lo aquejaba a los ligamentos de la rodilla obligaron al Sumo Pontífice a trasladarse en silla de ruedas.
Gobierno expresa condolencias por muerte de Sumo Pontífice: declara duelo nacional
La presidenta Dina Boluarte, visitó la Nunciatura Apostólica de la Santa Sede en el Perú para la firma del libro de condolencias con motivo del fallecimiento del papa Francisco.
“Con profundo pesar por la pronta partida de su santidad el papa Francisco. El Gobierno y el pueblo peruano sentimos el vacío y gran tristeza. Que en paz descanse y de Dios goce”, escribió Boluarte,
La mandataria llegó acompañada del premier Gustavo Adrianzén y el ministro de Relaciones Exteriores, Elmer Schialer. Tras permanecer media hora en el lugar, fueron acompañados hasta la salida por el nuncio apostólico, Paolo Rocco Gualtieri, y luego se retiraron del lugar.
Rocco señaló que Boluarte le indicó que decretaría duelo nacional por tres días. “Si recuerdo bien, me ha dicho que van a declarar tres días. Esperamos la declaración oficial del Gobierno”, manifestó.
Horas después, la jefa de Estado anunció que el Gobierno decretó duelo nacional por la muerte del Papa y que una misión “de alto nivel” viajará al Vaticano para que represente al Estado peruano en las exequias del Santo Padre.
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