Examigo de Ollanta Humala, Álvaro Gutiérrez, confirma versión de Martín Belaunde: “Nada se le escapaba a Nadine Heredia”
Aportante a campaña de expresidente señala que vio dinero en mochila, aunque no sabía si provenía de Odebrecht o de Venezuela.
Examigo de Ollanta Humala, Álvaro Gutiérrez, confirma versión de Martín Belaunde: “Nada se le escapaba a Nadine Heredia”.
¿Cómo conoció a Ollanta Humala y a Nadine Heredia?
Cuando regresé de un viaje al Perú, conocí a la hija de Ulises Humala. Conversando, me dice: “Mi tío va a postular a la Presidencia del Perú”. Le pregunto quién es su tío y me responde: “Ollanta Humala”. Me dio su número de teléfono, y desde Italia llamé; recuerdo que contestó Nadine. Me identifiqué y le dije que era una persona que había hablado con la hija de Ulises Humala y que me gustaría estar en el proyecto que estaban formando. Entonces me comentó que todavía no habían inscrito el partido, pero que cuando estuviera en el Perú los visitara. Y así fue. Los visité en la casa que tenían en Magdalena. Estaban recolectando firmas a nivel nacional.
¿En qué año fue?
Más o menos entre octubre y noviembre del 2005.
¿Con qué aportó usted al partido?
Mis aportes económicos ya están declarados en la ONPE y, después, en lo que pude ayudar con propiedades, bienes y eso. Se proporcionó la casa de Camacho, que la tenía un poco vacía, con personal de servicio pagado, porque yo siempre estaba de viaje en Arequipa. Como ellos no tenían casa y vivían en la casa de la mamá de Nadine Heredia, aceptaron mudarse a la mía. La única condición que les puse fue que mi casa se usara solo para reuniones muy exclusivas y privadas, ya que no quería un ir y venir constante de personas. Me aseguraron que así sería, y que solo recibirían a políticos y empresarios.
Justamente a ese inmueble es que Belaunde Lossio dice que fue el ex-CEO de Odebrecht, Jorge Barata...
Como el mismo Ollanta Humala ha señalado en sus declaraciones, yo estaba en Arequipa y, justamente en el mes de febrero, se estaba organizando el mitin de cierre de campaña que iba a ser en esa ciudad, sin saber que el señor Jorge Barata había llegado a mi casa en ese mes de febrero.
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