Doble derrota para el Gobierno. El régimen del mandatario Pedro Castillo sufrió dos sendos golpes contra su obsesiva pretensión de consolidar una cuestión de confianza que allane el camino hacia el cierre del Congreso, luego que durante la sesión del pleno del Legislativo, la Mesa Directiva rechazara de plano dicho pedido efectuado por el titular del Consejo de Ministros, Aníbal Torres.
Asimismo, el segundo golpe le fue infligido por el Tribunal Constitucional (TC), que declaró infundado el recurso de inconstitucionalidad presentado por el Poder Ejecutivo contra la Ley 31399 que regula el proceso de referéndum.
A través de un pronunciamiento, el presidente del Congreso, José Williams, del partido opositor Avanza País, dijo al inicio del pleno de este jueves que este mecanismo «debe cumplir requisitos constitucionales y legales vigentes en nuestro Estado de derecho».
«La Mesa Directiva ha acordado por mayoría rechazar de plano la cuestión de confianza planteada por el presidente del Consejo de Ministros por tratarse de maneras prohibidas para el planteamiento de una cuestión de confianza, tal como lo estableció el TC. Asimismo, hemos exhortado al Consejo de Ministros a respetar escrupulosamente los parámetros constitucionales y legales para la presentación de la cuestión de confianza» , detalló Williams.
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TORRES DERROTADO
Es el mismo jefe de la PCM no tuvo otra salida que renunciar, derrotado, esto porque en la misma bancada oficialista –según el congresista Américo Gonza, de Perú Libre- su situación era insostenible en el Gobierno.
«El señor Aníbal Torres está aprovechando el cargo, del poder que le ha dado el Presidente como primer ministro, para satisfacer egos personales. Él quiere irse dejando el cargo imitando al señor [Salvador] del Solar, pero él era un caballero, eran otras circunstancias», señaló Gonza ante periodistas.
Aníbal Torres no tuvo otra salida que presentar su carta de renuncia a la Presidencia del Consejo de Ministros, en lo que ha sido la primera consecuencia de que la Mesa Directiva del Congreso le denegara la conocida cuestión de confianza que solicitó ante el Pleno de la representación nacional en la fecha antes citada.
Es de recordar que la Constitución establece que, si el Congreso rechaza una cuestión de confianza, el Presidente debe recomponer su gabinete ministerial y, si tampoco se acepta este nuevo gabinete, el presidente de la República queda habilitado para disolver el Parlamento y convocar de inmediato a nuevas elecciones legislativas en un plazo de cuatro meses.
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