Terroristas queman vivo a policía en Juliaca
Dina Boluarte debe pagar el precio político de la falta de previsión de la violencia en el sur. «Mínimo deben renunciar el ministro del Interior y el de Defensa», señala Sheput.
Publicado:
Por Juan Pablo Chirito / Harold Salinas
La creciente escalada de violencia en la sureña ciudad de Juliaca, donde la madrugada de ayer fue calcinado vivo un efectivo de la Policía Nacional del Perú (PNP), ha llevado al Gobierno a declarar el toque de queda en Puno desde las 8 de la noche hasta las 4 de la madrugada por un espacio de tres días.
Y es que a tempranas horas de este martes una nota informativa de la PNP confirmó el lamentable asesinato, con extrema crueldad, del S2 PNP José Luis Soncco Quispe, quien fue quemado vivo, junto a un patrullero conducido por el suboficial de tercera PNP Ronald Villasante Toque, que recorría la urbanización Tambopata.
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El cadáver de Soncco Quispe fue descubierto por los agentes de la Unidad de Emergencia policial de dicha ciudad, junto al patrullero y Villasante Toque, quien fue hallado a un costado, herido y en ropa interior.
Según versiones oficiales, los agentes patrullaban la citada urbanización y en esas circunstancias fueron emboscados por una turba de unos 350 vándalos.
La horda asesina logró cercar e impedir el tránsito del patrullero, luego le bajaron las llantas y lo apedrearon, golpeando de paso a los policías hasta dejarlos inconscientes.
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