El MRTA nunca desapareció, estuvo en marchas antimineras

Aparece "comandante Camilo Reyes" y llama a la insurgencia armada ahora que anarquía impera en el país.

Diario expreso - El MRTA nunca desapareció, estuvo en marchas antimineras

En la esencia de un buen gobernante debe existir el hombre de gabinete para acercarse al estadista, pues los conflictos se solucionan con cuadros comparativos, la compulsa de datos y el consejo de expertos. El hombre de Estado como primera condición debe conocer plenamente la historia nacional. Sin una clara comprensión de sus matices, no puede llamarse estadista. Tenemos un mandatario algo desubicado que durante el aniversario de la Marina de Guerra elogió a Roque Sáenz Peña por haber caído -según él- heroicamente al lado del almirante Miguel Grau durante la infausta Guerra del Pacifico.

Sin embargo lo más grave es que por ese inacabable conflicto  que mantiene  con el Poder Legislativo, apoyado por la secta caviar no sólo se ha doblegado ante las exigencias del gobernador de Arequipa, suspendiendo una importante inversión que nos  convertiría en los primeros productores de cobre en el mundo sino que  ha descuidado el frente interno.

Las emboscadas terroristas a miembros de las fuerzas del orden no cesan en los valles de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro, y solo tenemos noticias sobre ataques a militares y policías, mas no la identificación de los autores.

MÁS SANGRE

Precisamente a mediados de junio de este año, cuando el Ejecutivo desde provincias se presentaba como el paladín anticorrupción -sin imaginar que sus conversaciones con el impresentable gobernador de Arequipa, Elmer Cáceres Llica saldrían a la luz, dejándolo muy mal parado- la banda de los hermanos Quispe Palomino emboscó a una patrulla de Ejército que realizaba un operativo de reconocimiento a solicitud de los pobladores de la comunidad de Valle Manantial, en Satipo, Junín. Dicho enfrentamiento se inició a la 1:30 de la tarde luego de que los subversivos sitiaran el pueblo, causando terror y zozobra entre los habitantes.

Allí cayó acribillado por disparos hechos con un fusil FAL que le destrozaron el cráneo, el valeroso suboficial EP Osmán Ccapa Mamani, en su intento de proteger a una familia cuya vivienda se había convertido en torreón de los subversivos. Luego los terroristas abandonaron el lugar mientras el cuerpo del heroico militar era recogido por sus camaradas.

Horas más tarde los efectivos militares emprendieron la búsqueda de los subversivos siendo emboscados a un kilómetro del poblado aproximadamente a las 4 y 30 de la tarde. Cuando se encontraban a un kilómetro de Valle Manantial cayeron abatidos los suboficiales EP Ítalo Pérez Ávila y Tomy Heredia Yovera, quedando heridos otros seis efectivos, todos integrantes de la Compañía Especial de Comandos de la 31 ° Brigada de Infantería.

Esa compañía desarticuló el año pasado una rama de la red de informantes de Sendero.

Precisamente fue esa unidad militar la que capturo a Roger Huamangoy Enrique, quien fungía de presidente de la asociación "Libertad de Mantaro" e inicialmente se había presentado ante las autoridades y fuerzas del orden diciendo que era víctima de amenazas por parte de Sendero, pero que fue delatado por varios terroristas arrepentidos como el principal informante de los hermanos Quispe Palomino.

El sujeto diariamente revisaba los celulares de los agricultores y les hacía seguimiento para ver si tenían contactos en las bases del Ejército y la Policía.

RECICLAJE

El  22 de abril de 1997, cuando los valerosos comandos de la Operación "Chavín de Huántar" liberaron a  72 rehenes y dieron el más duro golpe al grupo terrorista del "Movimiento Revolucionario Túpac Amaru" (MRTA), que al mando del siniestro  Néstor Cerpa Cartolini(a) "Evaristo" tomó la residencia del embajador de Japón, Morohisa Aoki, muchos imaginaron que dicha banda genocida había  sido liquidada.

El MRTA no desapareció. Según investigadores del Terrorist Incident Working Group (TIWG) o Grupo de Trabajo sobre Incidentes Terroristas estadounidense, el MRTA nunca dejó de estar vigente.

No es una utopía, no cerremos los ojos, como cuando en el pasado siglo el expresidente Fernando Belaunde Terry, mal informado por el entonces "elefante blanco" que era el Servicio de Inteligencia Nacional, refiriéndose a las huestes de Sendero, dijo que eran simples abigeos. Ello tiene sustento, pues los cabecillas emerretistas Pedro Hugo Avellaneda Valdez (a) "Eloy", Rodolfo Kleins (a) "Dimas" e Isaac Velasco Fuertes (a) "Ciego" se encontraban en una etapa de hibernación, pero no dejaron de comunicarse con sus militantes, especialmente con aquellos indultados durante el régimen del cleptocráta Alejandro Toledo Manrique y que posteriormente fueron vistos en las protestas del SUTEP a comienzos del gobierno de Pedro Pablo Kuczyski. Algunos incluso se infiltraron en agrupaciones de izquierda, como el Frente Amplio, cuya lideresa durante las elecciones de 2016, Verónika Mendoza, salió en su defensa diciendo que tenían todos sus derechos ciudadanos porque habían cumplido con las penas que les fueron impuestas.

Y antes- al igual que senderistas amparados por el Movadef- estuvieron entre los convocados por Mendoza para apoyar a PPK e impedir la llegada de Keiko Fujimori Higuchi a Palacio de Gobierno.

Por algún tiempo se creyó que la banda criminal creada por Víctor Polay Campos se había desintegrado y no existía.

La primera clarinada de que no era así se produjo el 30 de setiembre de 2010 cuando en las redes sociales, a través de la página web del "Diario Internacional”, un vídeo mostró la imagen de un individuo que  se identificó como el "comandante Camilo Reyes del VII Frente Guerrillero", quien desde algún paraje de la Selva Central hizo un pronunciamiento "dirigido al pueblo peruano".

Con voz enérgica y sin mayores preámbulos, anunció que “las Fuerzas Armadas Revolucionarias del Ejercito Popular Tupacamarista"(FAR-EPT) del MRTA convocaban a "los más pobres  y olvidados del Perú a la insurgencia popular contra el Estado peruano, reafirmando el ejemplo de  lucha y entrega del comandante de la dignidad tupacamarista Néstor Cerpa Cartolini y del heroico comando Edgar Sánchez", quienes el 17 de diciembre de 1996 tomaron la residencia de la misión diplomática de Japón imaginando hallar allí al expresidente Alberto Fujimori, quien se encontraba fuera de  Lima y no acudió al ágape ofrecido por el embajador Aoki.

CONDICIONES PARA RESURGIMIENTO

El MRTA aprovechó la coyuntura para demostrar que no fueron liquidados, como aseguró Francisco Soberón, jerarca de la Asociación Pro derechos Humanos (Aprodeh), aduciendo que  habían desaparecido y así lograr que no sean incluidos en la relación  de organizaciones terroristas del mundo. Consecuentemente y dadas las circunstancias de conflicto que existe entre los poderes del Estado y la anarquía propiciada por Cáceres Ticlla, gobernador de Arequipa, que  consiguió doblegar a un temeroso  Martín Vizcarra - por decir lo menos - y al separatismo que promueve el aymara Walter Aduviri desde Puno, se dan las condiciones para el resurgimiento  del MRTA y de redes  terroristas similares incluyendo Sendero.

Cabe recordar que Aduviri, en una actitud  separatista, afirmó que Puno debería  anexarse a Bolivia y que él gobernaría adoptando los dispositivos  que emanen del gobierno de Evo Morales, anuncio que favorece a  grupos terroristas como el MRTA y por lo cual debería ser denunciado por el delito de traición a la Patria, señaló José Páez  Warton estratega del  desaparecido Comando Operativo del Frente Interno (COFI) del  sector Defensa. Y agregó que bajo estas condiciones de desunión, no sería extraño que el MRTA nos dé una sorpresa que todo el Perú lamentaría.

VIOLENCIA INTERNA

Según sostienen investigadores del TIWG, los altos niveles de violencia interna que se viven en el Perú afectan gravemente la estabilidad por ser factores de perturbación a la seguridad nacional que deben enfrentarse  con una nueva estrategia integral, empleando  racionalmente todos los recursos  del Potencial Nacional (PN), unificando  en forma real la acción policial, serenazgo, gobiernos regionales y sobre todo a la población -como se hizo  en los 90 para vencer al terrorismo-  bajo la dirección de expertos con experiencia en inteligencia estratégica que hayan enfrentado al narcoterrorismo.

POR: CÉSAR REÁTEGUI

Puedes encontrar más contenido como este siguiéndonos en nuestras redes sociales de Facebook y Twitter.