El misterio del experimento Filadelfia: el buque de EE.UU. que sería el arma secreta para ganar la Segunda Guerra Mundial
El Ejército de los Estados Unidos quiso crear un arma secreta para ganar la guerra utilizando los principios de la teoría de campo unificado de Albert Einstein.

El misterio del experimento Filadelfia: el buque de EE.UU. que sería el arma secreta para ganar la Segunda Guerra Mundial.
En el verano de 1943, en plena Segunda Guerra Mundial, el USS Eldridge, un destructor estadounidense con capacidad para 200 hombres, fue el elegido para convertirse en el arma definitiva para luchar contra los submarinos nazis que asolaban el Atlántico. Para ello se puso a prueba una tecnología diseñada por el mismísimo Einstein para volver invisible la nave y teletransportarla.
Para llevar a cabo el supuesto experimento, se eligió la base naval de Filadelfia, que, en la actualidad, entre otras cosas, acoge naves militares retiradas del servicio. El conocido como Experimento Filadelfia tiene su origen en un oscuro proyecto de la marina norteamericana llamado Project Rainbow (Proyecto Arcoíris). Todo comenzó cuando el doctor Franklin Reno propuso a la Marina de Estados Unidos la posibilidad de que los buques de guerra fueran invisibles a los radares (no a los ojos humanos). Reno se basó en la teoría de Albert Einstein sobre la Relatividad y su relación entre el electromagnetismo y la gravedad. De esta manera se podía conseguir que un buque, envuelto en un anillo electromagnético, fuera indetectable para los radares enemigos.
Siempre según esta teoría, se contrataron técnicos privados que instalaron unos potentes generadores sin saber para que iban a servir, rodearon el casco del barco con decenas de metros de cable eléctrico y dotaron al USS Eldridge de complejos dispositivos electrónicos. La fecha escogida para la prueba sería el 22 de julio de 1943 y al parecer tuvo un éxito “relativo”. La leyenda cuenta que tras activar los generadores, estos rodearon al barco de una extraña neblina de color verde y desapareció de la vista de los presentes. Pero, por desgracia, el experimento acabaría provocando alteraciones mentales y desórdenes físicos a los marinos que se vieron implicados.
El 28 de octubre de 1943, en plena Segunda Guerra Mundial, se desarrolló quizás el mayor secreto militar de todos los tiempos en los astilleros navales de Filadelfia. Un barco de guerra se hizo invisible a los radares y la vista humana y apareció a cientos de kilómetros de distancia.
Su nombre original era El proyecto Arcoíris, aunque los amantes de las teorías conspirativas y más tarde la industria del cine llamaron a lo ocurrido el 28 de octubre de 1943: “El Experimento Filadelfia”. Estoy seguro de que alguna vez habrán oído hablar del destructor de la Armada USS Eldridge, ese barco de inmensas dimensiones y toda su tripulación que, según cuenta la historia, llegó a hacerse invisible para poder despistar al enemigo.
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El Experimento Filadelfia ha sido objeto de una larga controversia, debate y visión dudosa. La base es que fue un experimento realizado por la Marina para crear un barco que no pudiera ser detectado por las minas magnéticas y el radar. En otras palabras, querían hacer invisible un barco. El barco desapareció junto a su tripulación y tras encontrarlo una escena macabra y espantosa fue hallada.
Pero aún hay más, aquel supuesto experimento de guerra ocasionó algo aún más inesperado, la teletransportación. El USS Eldridge apareció a cientos de kilómetros de los astilleros navales de Filadelfia donde se encontraba. Un acontecimiento fuera de la lógica y la comprensión que se encuentra hoy en día como documento clasificado. La Armada de los EE.UU. sostiene que jamás hubo tal experimento y que lo ocurrido aquella mañana del 28 de octubre de 1943 solo existió en la mente de todos aquellos que se dedican a construir teorías conspirativas.
Tesla y el proyecto arcoíris
Las pruebas empezaron en julio del 1943 y cuentan que tuvieron cierto éxito. El barco se envolvía en una especie de bruma verdosa y, de repente, desaparecía en los radares durante unos segundos. El proyecto iba bien, pero la tripulación se solía quejar de náuseas, vómitos y mareos, así que decidieron hacer unos pequeños cambios para afinar un poco mejor la tecnología. Se reanudaron las pruebas el 28 de octubre del mismo año, en unos astilleros de Filadelfia, pero esta vez sucedió algo inesperado. Los generadores gigantes del USS Eldridge empezaron a vibrar de un modo muy intenso, ensordecedor. Se levantó un manto muy espeso de niebla verde y cubrió por completo el buque. Cuando dicha bruma se dispersó, el cielo se iluminó por un rayo azul y el USS Eldridge desapareció.
Su desaparición duró 15 minutos. Y durante ese tiempo, sucedió algo tan asombroso como desconcertante. El buque apareció de repente a cientos de kilómetros de Filadelfia, concretamente en la base naval de Norfolk, Newport News, Virginia. Después de estar ahí, apareció de nuevo en su posición original en los astilleros de Filadelfia.
Carl Meredith Allen era un marinero de la tripulación del barco S.S. Andrew Furuseth, un testigo que estuvo presente durante el experimento y que posteriormente relató y sacó a la luz lo sucedido aquel día. Según él, cuando el USS Eldridge desapareció tras el rayo azul, todos los que estaban ahí viendo lo que ocurría sufrieron hemorragias nasales y mareos.
Pero lo peor sucedió cuando al cabo de unos minutos, el buque retornó a su posición original, al astillero de Filadelfia. Cinco miembros de la tripulación estaban fundidos con la estructura metálica del buque. Otros marineros, habían perdido parte de su cuerpo: brazos, piernas… Un suceso inexplicable y dantesco que según cuentan el Ejército quiso ocultar de inmediato, pero que a muchos les costó la vida.
Tecnología y ufología
Un tal Carl Meredith Allen, bajo el nombre de Carlos Miguel Allende, un supuesto marino de la nave SS Andrew Furuseth, declaró que vio desaparecer al USS Eldridge desde su propio barco. Allen mantuvo correspondencia con el ufólogo Morris Jessup. En ella, el marino decía poder aportar datos fehacientes de los hechos que estaba narrando. El ufólogo quedó impresionado con el relato y lo incluyó en un libro llamado El Caso de los OVNIS (The Case For The UFO). Jessup se suicidó cuatro años más tarde (al parecer, al ser incapaz de repetir el éxito de su obra anterior), lo que contribuiría a dar pábulo a la leyenda del Experimento Filadelfia.
Lo que sí es cierto es que, en la década de 1940, la Marina estadounidense experimentó con la invisibilidad. Naturalmente no se trataba de invisibilidad a simple vista tal como la podemos entender. Al parecer, el USS Eldridge se dotó de una técnica llamada degaussing, y su objetivo era reducir el campo magnético del buque para evitar ser un blanco fácil de las minas y los torpedos magnéticos de los submarinos alemanes.
El marinero Carl Meredith Allen denunció lo ocurrido años después, en 1956. Bajo el pseudónimo de Carlos Allende envió tres cartas al profesor de astronomía, matemáticas y ufólogo Morris K. Jessup para que publicara lo ocurrido. Explicó, además, que muchos de sus compañeros y tripulantes a bordo del USS Eldridge habían desparecido delante de él como si una luz los desmaterializara de pronto. Otros, estaban encerrados en psiquiátricos guiados por una inexplicable locura.
Gracias a Allen conocemos lo sucedido aquel octubre del 1943, pero nadie pudo demostrar que el “Proyecto Arco íris” se realizara realmente. El Instituto Naval norteamericano apenas dispone de documentos gráficos del USS Eldridge. El propio barco se desmanteló en Grecia en 1951 y reconstruido bajo el nombre de Leon HS.
Morris Jessup, el científico que recibió las cartas de Allen, se encontró al poco sin vida en su coche en una carretera de Florida. Y el joven Allen, que se arriesgó a relatar lo sucedido, terminó su vida como muchos de sus compañeros de la Marina, testigos del experimento Filadelfia; se declaró loco y encerrado en un asilo.
Desmembrados y desaparecidos
La historia cuenta que las marcas sobre el agua desaparecieron, lo que significa que el barco desapareció por completo y reapareció en la base de Norfolk (Virginia) a ¡600 kilómetros de distancia! y no solo eso, sino que también viajó en el tiempo ya que apareció ¡15 minutos en el pasado!
Al parecer, las consecuencias de este segundo experimento fueron aún más devastadoras para la tripulación que las del anterior, por lo que la Marina estadounidense decidió cancelar el proyecto definitivamente. Se dice que la mayor parte de los marineros que participaron en el experimento desarrollaron esquizofrenia y algunos perdieron por completo el juicio. Otros sufrieron heridas de gravedad al materializarse en un lugar distinto, y otros, los menos afortunados, ¡se fusionaron con el casco del barco! También se dijo que días después del experimento, algunos se desvanecieron y nunca más volvieron a aparecer.
Teorías conspirativas
A dónde había ido el barco, solo se puede especular. Algunos testigos afirmaron que fue al puerto de Norfolk, y otros dicen que fue 40 años en el futuro y terminó en Montauk, Nueva York. La Marina, por supuesto, lo negó todo y afirmó que los hombres se habían perdido en el mar. Incluso hay una historia elaborada que combina el Experimento Filadelfia con el Proyecto Montauk, un bucle temporal que une a los marineros del Eldridge con Montauk, Nueva York, con un bucle temporal hasta 1983.
En cuanto a la misteriosa desaparición del USS Eldridge, Edward Dudgeon, uno de los marineros que se encontraban a bordo del navío, explicó que el origen de esa historia se debe a un incidente ocurrido en la base de Norfolk. El Eldridge recaló allí para aprovisionarse, pero pronto soltó amarras y regresó a Filadelfia, adonde llegó en menos de seis horas. Algo realmente sorprendente si tenemos en cuenta que esa zona estaba infestada de submarinos alemanes. En realidad, es posible que el barco optara por navegar a través del canal Chesapeake & Delaware, que permite efectuar un rodeo. Para finalizar, el “relámpago” del cual habla la leyenda puede deberse a algo tan simple como una descarga de plasma ionizado, algo que todos los marinos conocen desde hace siglos como fuego de San Telmo.
La Marina estadounidense siempre ha negado la existencia del Experimento Filadelfia, y en un comunicado hecho público en noviembre del año 2000, la Oficina de Investigación Naval de la Marina (ONR por sus siglas en inglés) negaba completamente la existencia de ningún programa de invisibilidad o teletransportación, así como la implicación de Albert Einstein en el tema. Un resumen de la nota hecha pública por la Naval History & Heritage dice así: “La Oficina de Investigación Naval (ONR) ya ha explicado que el uso de campos de fuerza para hacer que un barco y su tripulación sean invisibles no se ajusta a las leyes conocidas de la física. La ONR también asegura que la teoría de campo unificado del doctor Albert Einstein nunca ha podido completarse. Entre 1943 y 1944, Einstein trabajó como asesor a tiempo parcial para la Marina en investigación teórica de explosivos y explosiones. No existe evidencia de que Einstein haya trabajado en nada relacionado con invisibilidad o teletransportación”.

Pruebas para el experimento
La idea del experimento surgió de las investigaciones y experimentos de un grupo que involucraba a Nikola Tesla sobre la posibilidad de la invisibilidad mediante el uso de la electricidad. Los experimentos tuvieron éxito para objetos pequeños y, alrededor de 1939, se presentó al gobierno. El Ejército estaba particularmente interesado en esto, posiblemente debido al hecho de que había una guerra en ese momento, y una tecnología como esta sería monumental. En 1943, el gobierno decidió realizar una prueba con animales domésticos en un barco. Era el USS Eldridge en el que se colocaban los animales en jaulas metálicas. De hecho, la nave se volvió invisible, pero cuando se volvió a observar a los animales, varios de ellos tenían marcas de radiación y quemaduras, y varios estaban desaparecidos. Habían decidido que los humanos no debían ser probados.
A pesar de esta decisión, el 12 de agosto del mismo año, el USS Eldridge, con una tripulación humana a pleno rendimiento a bordo, se sometió a este experimento. La tripulación no sabía que estaba a punto de ocurrir un experimento. Los generadores se pusieron en marcha, se accionó el interruptor y la nave desapareció, como se esperaba. Se dice que el USS Eldridge fue teletransportado de Filadelfia a Norfolk y viceversa en cuatro horas; su tripulación sufrió extraños efectos físicos y mentales. Se dice que, hacia el 28 de octubre de 1943, el USS Eldridge se hizo invisible y se teletransportó de Filadelfia (Pensilvania) a Norfolk (Virginia), utilizando los principios de la teoría del campo unificado de Albert Einstein. Cuatro horas después, se rematerializó en Filadelfia.
Efectos colaterales
Durante el Proyecto Filadelfia, se dieron supuestos efectos anómalos, la materia cambió. Los hombres eran capaces de atravesar objetos físicos. Cuando se desconectó el campo unificado, algunos miembros de la tripulación quedaron atrapados en mamparas, en el suelo y empalados por barandillas. Lo que se observó cuando el barco regresó fue bastante perturbador; cuando regresó a su lugar original, había una neblina verdosa en la cubierta y alrededor del barco. Algunos marineros estaban en llamas. Algunos se habían vuelto locos. Todos ellos estaban enfermos, algunos sufrían de ataques al corazón y otros simplemente estaban muertos. Lo más asombroso de todo fue que algunos de los marineros se habían convertido en parte de la estructura del barco mismo, enterrados en las paredes o en la cubierta del barco.
Además, algunos de los hombres estaban desaparecidos. Otro efecto secundario fue que los hombres se “atascaron”. Quedarse “atascado” básicamente consistía en volverse incapaz de moverse o interactuar con nadie durante largos períodos de tiempo. Los miembros de la tripulación llamaron a este fenómeno como ‘Hell Incorporated’. Otro nombre para esto fue “Congelar”. Un congelamiento común duraría de unos minutos a unas pocas horas y dañaría a la persona psicológicamente, pero no causaría locura. Un hombre saldría del congelamiento si los otros miembros de la tripulación le pusieran las manos encima para “darle fuerza”. Esto generalmente funcionó, excepto en un caso, dos hombres intentaron poner sus manos sobre un miembro de la tripulación congelado, y estalló en llamas y ardió durante dieciocho días. Los incendios no pudieron ser detenidos, ni se extendieron a los lugares aledaños.
Datos técnicos en el Proyecto Filadelfia, manifiestan que el principio subyacente al Experimento Filadelfia fue la Teoría del Campo Unificado. Esta teoría establece que la gravedad y el magnetismo están conectados, así como la masa y la energía están conectadas a través de la fórmula E=mc2. Einstein nunca resolvió la Teoría del Campo Unificado, pero la naturaleza misma del Experimento Filadelfia sugiere lo contrario. Es probable que esta teoría se haya convertido en un secreto del gobierno porque es capaz de hacer muchas cosas, posiblemente incluso viajes espaciales sin la ayuda de cohetes. Hasta el día de hoy el llamado Experimento Filadelfia sigue generando controversia y misterio.
Se dijo también que la tripulación del buque mercante civil SS Andrew Furuseth vio la llegada del USS Eldridge a la bahía de Chesapeake. USS Eldridge El buque era un destructor de escolta de la clase Cannon de 1.240 toneladas construido en Newark, Nueva Jersey. Fue comisionado en agosto de 1943 y desplegado en tareas de escolta en el Atlántico hasta mayo de 1945, cuando fue asignado al servicio en el Pacífico. Fue dado de baja en julio de 1946 y destinado a la Flota de Reserva. En enero de 1951 fue transferido a la Marina griega, donde prestó servicio como León hasta la década de 1990.

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