El dilema de decidir el voto
El dilema de decidir el voto
Llueven por las redes sociales mensajes, memes con información falsa a favor y en contra de candidatos, y anuncio del voto de algunos apoyando a pecho abierto a su candidato, los que se suman al granizo de las encuestas para todo mandado, que preocupa por qué la ONPE no fiscaliza en tiempo real.
Decidir el voto se ha convertido en una prueba de fuego para iniciados en política y en investigación social, y en un dolor de estómago para los ciudadanos atiborrados de información interesada, por lo cual la decisión de por quién votar se ha convertido en un serio dilema.
Tiradas las cartas sobre la mesa electoral, se les han caído las caretas a los más histriónicos que fungen de ser los salvadores del Perú escondiendo la cola debajo del poncho peruano que les oculta el polo de la colonización globalista del Nuevo Orden Mundial.
Verónika Mendoza, Marco Arana, Keiko Fujimori, Hernando de Soto, Rafael López Aliaga, Julio Guzmán, Daniel Salaverry, George Forsyth, por distintas razones defienden la agenda ONU 2030 y/o los intereses de la elite globalista que nos está colonizando, con la diferencia que los de izquierda con el modelo comunista.
Un Rafael Santos y un Ciro Gálvez que no se sabe qué proponen porque en el debate presidencial se dedicaron a insultar a sus contendores, el segundo en quechua, se han deslegitimado solos.
Alberto Beingolea representa un partido social cristiano, que se ha convertido en un impulsor de la agenda 2030 desde que Marisol Pérez Tello se convirtió en su abanderada como ministra de PPK.
De los que quedan con opción a pasar a segunda vuelta están Yonhy Lescano, víctima de una delictiva contracampaña de redes sociales, y Pedro Castillo, que ha avanzado a galope en los últimos días por apoyo de las bases magisteriales y por organizaciones que ven en su candidatura la representación de la mayoría olvidada del Perú. Detrás de estos candidatos están los partidos Acción Popular, de centro y de probada trascendencia democrática, y Perú Libre, de izquierda, del cual no hay más experiencia que el gobierno regional de Vladimir Cerrón.
Se ha montado una contracampaña mintiendo sobre los candidatos Lescano y Castillo, los cuales son probadamente pro vida y familia, como lo demuestran los proyectos de leyes del primero y las manifestaciones públicas del segundo, de hace varios años.
Dios nos ilumine.