Martín a la deriva
Martín a la deriva
Por su propia incompetencia el Gobierno sigue desplomándose en las encuestas y, frente a ello, sus asesores solo atinan a disparar fuego a discreción: contra el Congreso, contra su propio Gabinete y contra una oposición que, por fin, estaría dispuesta a aleonarse.
Perder 22 puntos porcentuales en seis meses ha causado estragos cuasi mortales al moqueguano, quien no tiene partido, bancada ni operadores políticos. Por eso el jueves de la semana pasada trató de recuperar iniciativa con un mensaje sorpresivo de escenografía fascistoide y plagado de graves errores estratégicos: volvió a interferir con otros poderes del Estado al referirse al caso de un ex juez supremo procesado en Madrid, con lo cual dio pie al argumento de la persecución política; lo mismo hizo con el trance mediáticamente manipulado del hoy preso PPK; buscó pechar al Congreso por reformas que si bien las presentó el Ejecutivo hoy están fuera de su dominio y carecen de prestigio tras el desastre del referéndum; y se espantó por los “errores” incluidos en textos escolares pornográficos.
Nada de eso le sirvió. El domingo nuevas encuestas ratificaron el desplome presidencial y Vizcarra, ofuscado por evidentes desavenencias con Del Solar, terminó desembarcando del Gabinete a un ministro investigado por corrupción, Carlos Bruce (Vivienda); y a otro, Trujillo (Transportes), eventual responsable por la muerte de 17 pasajeros en un paradero informal.
Vizcarra ha desmontado, así, en menos de un mes, un equipo ministerial que nunca debió ser convocado con tanta precariedad y, encima, sigue emperrechinado con mantener en el cargo a la ministra Flor Pablo, investigada judicialmente, con polémica trayectoria en el Ministerio de Educación, responsable por entregar textos inaceptables para los educandos y con reacciones subnormales como la de pedir que se tachen con plumón los ‘links’ a sitios web pornográficos. Es decir que el compromiso de Vizcarra con la ideología de género tiene raíces más fuertes que su propia sobrevivencia política… como para investigar.
La deriva gubernamental también ha llevado al premier a rendirse vergonzosamente en el caso de Las Bambas, dejando abiertas las puertas para que la oclocracia se apodere del final del Gobierno.
Y esta semana la paz estará perturbada porque el Ejecutivo está dispuesto a lanzarse con todo en el intento de detención arbitraria de Alan García y el enfrentamiento con Fuerza Popular, grupo que se reclama recargado. Ya veremos los intríngulis, pero es muy remoto que este gobierno tenga una feliz pascua de resurrección.