Al revisar la historia de nuestra patria muchos compatriotas nuestros, contribuyeron a crear la conciencia nacional; aunque a veces aletargada y adormecida, pero sin esa conciencia no habría razón de ser de el porqué luchar por una patria como la nuestra, muchos de nuestros antepasados enfrentaron y sufrieron las consecuencias muriendo por un ideal, “El Honor Nacional“. El Perú pagó con sangre de sus mejores hijos con monumentos y otros sin él, con sepultura y sin sepultura; sin embargo  lo hicieron por ver un país próspero porque con las virtudes y valores que poseían iban construyendo el  Alma Nacional.

En las actuales circunstancias somos conscientes que son momentos también difíciles, sin embargo tenemos un Virgilio Martínez, representante de la nueva generación de empresarios que lleva a través de la gastronomía con productos de la Costa, Sierra y Selva a ser  los mejores en el mundo, pero también hay muchos otros Virgilios representados en peruanas y peruanos  que en el anonimato, con poco o mucho, llevan en su corazón el amor al Perú y que día a día construyen la esencia humana de ser cada vez mejores personas; estudiando y trabajando con el anhelado deseo de que sus hijos sean mejores que los padres y eso es construir patria.

Tenemos unas Fuerzas Armadas y Policía Nacional que demostraron que la Constitución es la herramienta fundamental para mantener la libertad y la democracia, que a pesar de la ingratitud de muchos y la sacada de cuerpo de otros, con la escasez de recursos presupuestarios (los menores en América Latina) y sueldos congelados desde hace más de diez años, ahí están a lo largo y ancho de nuestra patria; ellos sí se confunden con el pueblo, viviendo de cerca sus necesidades y realidades, eso es construir patria.

Sin embargo también hay un porcentaje minoritario de seres humanos peruanos, que no digieren lo que es Patria,  menos aún la heroicidad de muchos que anhelaron un país grande y próspero, por lo contrario  sin temor a equivocación, el día a día lo utilizan para elucubrar el CÓMO hacer para destruir física y moralmente a las personas mediante el engaño y con promesas imposibles  de realización obedeciendo a postulados que nunca tuvieron éxito ni lo tendrán, el exagerado resentimiento e interés personal de sus líderes podría catalogárseles como traidores a la patria, los hechos lo demuestran, ya que son personas cuyo objetivo es al pobre hacerlo más pobre, al que está saliendo de alguna crisis vivencial impulsarlo hacia abajo para que continúe ahogándose, al emprendedor exitoso cómo hacer para que no continúe con su ruta trazada, cómo evitar para que ese cúmulo de minas que por gracia divina disponemos no sean explotadas, cómo crear el caos y destrucción para provocar un trofeo de guerra y decirle al mundo que el Perú tiene una democracia hibrida y de escasa seguridad jurídica y evitar así el Perú soñado por nuestros antepasados, esos son los destructores de la patria.

Por Ronald Hurtado Jiménez 

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