Participación cultural a partir de las huacas

Participación cultural a partir de las huacas

El 15 de diciembre pasado, el Ministerio de Cultura emitió la resolución ministerial N.° 516-2023-MC, que aprueba el Plan de acción “Perú: País de las Huacas”, con el que se busca intervenir en la gran mayoría de huacas (80% aproximadamente de los más de 27 mil registrados a nivel nacional) que carecen de medidas efectivas de protección y conservación.

Este plan de acción busca trabajar de la mano con el sector privado a fin de generar sostenibilidad en estos inmuebles arqueológicos, convirtiéndolos en espacios de participación cultural aprovechables por la sociedad.
Durante la presentación del plan de acción, la ministra resaltó la necesidad de “darle uso a nuestros sitios arqueológicos con ferias, espacios de lecturas, conciertos y actividades, que se van a proponer a la empresa privada”, algo que debió plantearse hace mucho, considerando el costo cultural e histórico que ha tenido el descuido por la preservación del patrimonio.

Si bien el Perú cuenta con un gran legado histórico y que todo el mundo reconoce los avances y el desarrollo de nuestra cultura precolombina, el Estado peruano no ha podido salvaguardar el patrimonio, siendo comunes los casos de extracción irregular e ilegal de restos arqueológicos, la destrucción de diversas construcciones debido al establecimiento de asentamientos humanos, la acumulación de residuos y basura en distintos templos y monumentos milenarios, entre otras formas de destrucción del patrimonio, principalmente de las huacas.
La falta de recursos debido al poco interés de parte de nuestras autoridades, pero también de parte de la comunidad científica peruana (que no ha sido capaz de poner en agenda una propuesta viable para la totalidad del patrimonio arqueológico), son las principales causas por las que estos espacios histórico-culturales no han podido ser protegidos ni conservados.

A pesar de los estragos que generó la pandemia del Covid-19 al turismo en el Perú, y posteriormente, los hechos de violencia que afectaron el turismo durante las protestas de inicios de 2023 (en apoyo del golpe de Estado de Pedro Castillo), los empleos en el sector se vienen recuperando y las posibilidades para expandir circuitos turísticos a partir del patrimonio cultural a nivel nacional podrían sentar las bases para un desarrollo económico fundamentado en la cultura.

El reto real implica hacer de las ciudades peruanas focos culturales, que generen dinamismo a partir de los espacios de participación que se generan. Distintos países en el mundo han podido aplicar modelos de ciudades culturales, con diferentes enfoques, y, sin embargo, todas han generado espacios de desarrollo que pueden servir de ejemplo a sociedades con las potencialidades para lograr lo propio.

España vive del turismo, Italia también, Francia es conocido por ser el principal destino turístico del mundo, EEUU no se queda atrás; todos generan desarrollo a partir de sus propias potencialidades culturales, algunas históricas, otras industriales.

Comprender que la participación en la cultura requiere de la intervención del sector privado es un avance institucional importante en el país; dadas las condiciones y la gran cantidad de patrimonio arqueológico inmueble, no hay otra forma de hacer de este patrimonio, espacios culturales lugares vivos, que fomenten la participación en la cultura y, en ese sentido, contribuyan a generar medios de desarrollo.

Esperemos que el Estado gestione adecuadamente este plan de acción y en el mediano plazo pueda devolver la vida a las huacas, salvaguardando el patrimonio, y con esto, el legado de nuestro país al mundo; lo que inevitablemente generará espacios de participación y desarrollo, que podrían ser aprovechados por todos los peruanos.

Mira más contenidos siguiéndonos en Facebook, Twitter, Instagram, TikTok y únete a nuestro grupo de Telegram para recibir las noticias del momento.