El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha publicado, en este mes, su informe sobre las perspectivas económicas mundiales, brindando una visión integral del panorama económico-financiero global en los próximos años. Este informe destaca tanto los avances como los desafíos que enfrenta la economía mundial.

n términos generales, se proyecta que el crecimiento económico global se mantendrá en un nivel modesto, con una tasa del 3.1% en los próximos cinco años. Esta cifra representa la tasa más baja de crecimiento en décadas, lo que refleja una recuperación económica constante pero lenta después de los impactos de la pandemia de COVID-19 y otros eventos globales.

Uno de los aspectos alentadores del informe es la disminución gradual de la inflación a nivel mundial. Se espera que la inflación pase del 6.8% en 2023 al 4.5% en 2025. Este descenso en la inflación, aunque gradual, proporciona cierto alivio económico y podría allanar el camino para políticas monetarias más flexibles en varios países.

Sin embargo, estas tendencias positivas se ven contrarrestadas por una serie de desafíos económicos significativos en diferentes regiones del mundo. Por ejemplo, se proyecta que Estados Unidos experimente un crecimiento del 2.7% en 2024, pero esta tasa se reducirá al 1.9% en 2025 debido a ajustes fiscales y debilitamiento en los mercados laborales.

La zona euro enfrenta un panorama aún más sombrío, con un modesto crecimiento del 0.8% en 2024 y una ligera recuperación del 1.5% en 2025. Los efectos del aumento de los precios de la energía y una caída en la inflación se espera que respalden el crecimiento del ingreso real y la recuperación económica en esta región.
China, a pesar de los esfuerzos del gobierno para mantener un crecimiento del 5%, verá su ritmo de crecimiento reducido al 4.6% en 2024 y al 4.1% en 2025. Estos números reflejan los desafíos que enfrenta la segunda economía más grande del mundo en medio de tensiones comerciales y reformas internas.

Además, hay preocupaciones sobre el impacto de las políticas fiscales y monetarias en el crecimiento económico futuro. Mientras se espera que la convergencia hacia las metas de inflación y un cambio hacia políticas monetarias más flexibles estimulen el crecimiento, el endurecimiento de las políticas fiscales para abordar altos niveles de deuda podría frenar el crecimiento económico en varios países.

Los riesgos para las perspectivas económicas globales incluyen tensiones geopolíticas, como la guerra en Ucrania y el conflicto entre Gaza e Israel que ya involucra a Irán, que podrían aumentar las expectativas de tasas de interés y reducir los precios de los activos. En China, la falta de acción para abordar problemas en el sector inmobiliario podría afectar el crecimiento y perjudicar a sus socios comerciales.

Por otro lado, existen oportunidades para estimular el crecimiento económico mediante reformas estructurales y avances tecnológicos. La inteligencia artificial y otras innovaciones podrían impulsar la productividad y contribuir a una recuperación económica más sólida en todo el mundo.

Es crucial que los países y las instituciones internacionales trabajen juntos para abordar los riesgos y promover un crecimiento económico sostenible y equitativo en todo el mundo. La cooperación multilateral y el compromiso con reformas económicas sólidas serán fundamentales para construir un futuro económico más próspero y estable.

En marzo de este año, una Misión del FMI vino al Perú y realizó, conjuntamente con las autoridades peruanas, una evaluación de la situación de la economía, tras lo cual generó una serie de recomendaciones para afianzar el proceso de recuperación económica; sobre esto hablamos en nuestro artículo “Recomendaciones del FMI a Perú, marzo 2024”, publicado el 7 de abril; con esos insumos el FMI proyecta que el crecimiento del PBI del Perú para 2024 solo será de 2.5%, y para el 2025 de solo 2.7%.

Añadimos que el Banco Mundial proyecta un crecimiento de 2.7% para el 2024 y de 2.4% para el 2025.
Por su parte, el Ministerio de Economía y Finanzas y el Banco Central de Reserva proyectan que la economía peruana crecería 3% este año. A pesar de que distintos especialistas locales, considerando la recesión de 2023 (-0.6%), también proyectan un crecimiento menor para el 2024 (Macroconsult 2.7%, IPE 2.4%, entre otros); cifras preocupantes, porque un crecimiento tan lento perjudica el cierre de brechas y la reducción de la pobreza.

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