Un corazón resentido nunca es feliz
Un corazón resentido nunca es feliz
La felicidad, la alegría, no se disfruta, cuando en el interior del corazón no has resuelto las dificultades que no te permiten seguir adelante, compartir con determinada o determinadas personas, porque no has zanjado las diferencias, que algunas veces se resuelven y otras no, depende mucho de la personalidad, se habla del perdón como solución a los problemas que aquejan, no es fácil perdonar, está en juego muchos aspectos, la gravedad de la afectación, personas ni con el perdón cambian su manera de pensar, actuar, no lo internalizan que su actitud dañó a la otra persona, frente a estas realidades existe otras alternativas, la lejanía, porque son personas tóxicas, más bien es recomendable trabajar en programas de psicoterapia para aprender a canalizar, manejar, afrontar, lo que no te hace feliz para continuar viviendo, frente a situaciones que no permiten tener paz, hay que trabajar la resignación, no como víctima, sino como ser humano, admitiendo que no hay solución y es necesario seguir adelante con la vida, porque la persona no está sola, tiene familia con quien compartir los buenos momentos de la vida, para tener una vida sana, equilibrada y en paz.
Una persona que fue víctima de violación por su padre cuando era niña, que en lugar de recibir, amor, cariño, respeto, protección, seguridad, este inocente ser humano, queda marcada para toda la vida con un trauma psicológico, en el sentido de que va a desconfiar de las personas, le va a hacer difícil formar pareja, amistades, se va a sentir rechazada, sus relaciones sexuales no van a hacer gratificantes sino de mucha frustración con el riesgo de presentar un trastorno de personalidad de frigidez por la experiencia que le tocó vivir, pero son situaciones que pueden manejarse, le toca como pareja una persona de buenos sentimientos, que comprende su situación emocional, va a colaborar positivamente que la persona afectada se sienta segura, pero no todos los casos responden así, en algunas circunstancias las personas no lo pueden manejar, se sienten tan vacías por dentro, sin alternativa de vida y se suicidan.
La pregunta es: ¿una hija podría “perdonar” a su padre que la ha violado? Considero que no, que va a vivir toda su vida con esa experiencia negativa y necesita ingresar a psicoterapia, para comprender, entender el origen, las causas, motivos de lo que le sucedió, que no se sienta culpable y pueda canalizar su experiencia negativa, que les sucede a muchas personas, que la justicia se encargue de sancionar al violador, empero la víctima debe trabajar emocionalmente en forma profunda para liberarse y lograr ser feliz.
Si bien es cierto un corazón resentido no puede ser feliz, lo primero que hay que hacer es trabajar a qué se debe el resentimiento, con quién y por qué, se trata de aspectos personales, porque muchas veces el ser humano no está conforme consigo mismo o tiene problemas en su relación de pareja, la infidelidad, la falta de amor, cariño, comprensión; otras veces, dificultades con los hijos, no respetan a los padres, existen temas de violencia familiar, los hijos están distantes de los padres, o se trata de problemas de trabajo, celos, competencia, oportunidades, o problemas económicos como acreedor o deudor, o los hijos no escogieron las parejas adecuadas y se han llenado de obligaciones y no les alcanza el dinero, o existe la envidia y celos entre los hermanos, padres, hijos, amistades; en segundo lugar, la aceptación de parte de la persona o personas que están resentidas, porque algunas no lo aceptan, por orgullo, vanidad, soberbia y en esos casos no se puede solucionar nada; y en tercer lugar, voluntad para trabajar los problemas en busca de la felicidad.
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