Denuncian abandono en el Vraem: soldados no tienen equipos adecuados contra el narcoterrorismo

¿Emboscada o enfrentamiento? No importa cuáles hayan sido los motivos que hoy nos llevan a lamentar la muerte de cuatro soldados del Ejército Peruano en la zona del Valle de los Ríos Abancay, Ene y Mantaro (Vraem). Lo real es que una vez más queda al desnudo el abandono y la falta de equipamiento que acusan nuestros militares en un territorio que el narcotráfico y el senderismo tienen sitiado a vista y paciencia de nuestras autoridades.

En Ayacucho, durante la madrugada del lunes, una patrulla de las fuerzas del orden, que se encontraba realizando acciones de control territorial en el Vraem, sostuvo un enfrentamiento con una columna terrorista en el distrito de Putis, provincia de Huanta, informó el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas.

“Durante el enfrentamiento, las fuerzas del orden lograron abatir a dos delincuentes terroristas, los cuales cayeron con su armamento de largo alcance”, explicó. Sin embargo, señaló que cuatro militares fallecieron y tres efectivos resultaron heridos.

La institución, mediante un comunicado, comentó que se está intensificando las operaciones en la zona, con la finalidad de identificar y capturar a los delincuentes terroristas implicados.

Pide un ZAR

Con la experiencia que le brinda haber sido la máxima autoridad de la Dircote, el general PNP (r) José Baella sugiere el nombramiento de un zar o coordinador que se encargue de dirigir una estrategia conjunta contra este flagelo narcoterrorista que tiene un millonario respaldo de organizaciones colombianas y mexicanas que negocian la droga en el exterior. “Cambiar al ministro no es la solución, pero debería asesorarse con las personas que tengan la experiencia debida. Hace unos años se nombró a un zar que logró hacer muy buenas capturas, necesitamos una cabeza que coordine con las Fuerzas Armadas, con la Policía y con la propia empresa privada que quiera sumarse a esta lucha”, indicó a EXPRESO.

Sobre los vehículos que utilizan los soldados peruanos en esta zona de conflicto, Baella sostuvo que no son los apropiados para este tipo de operativos.

“Salen a patrullar en camionetas 4×4 que son como una mantequilla, cuando lo ideal es que lo hagan en vehículos blindados. El problema es la falta de gestión, pasan los gobiernos y ninguno entiende que estamos en una guerra en el Vraem (…) es un tema político que viene de años y nadie se preocupa de eso hasta que salta la noticia de que tenemos soldados muertos. Lamentablemente el poblado de la zona se siente en el medio, amenazado por Sendero y por los traficantes de drogas”, agregó.

Alianza siniestra

Para el exmiembro del GEIN, José Luis Gil, nada logra convencer a los políticos de que el problema real en el Vraem no es solo el narcotráfico, sino el terrorismo en sí mismo, organizado y dirigido por el alias “camarada José”, quien no pierde tiempo para continuar en su delirante carrera hacia la utopía del comunismo.

“En el Vraem existe una alianza siniestra entre terroristas y narcotraficantes, pero, aparentemente, enfocarse en esta hipótesis nos hace perder la perspectiva de quién realmente estamos combatiendo. Nos olvidamos de que ellos, los terroristas, están ideologizados, politizados, tienen estrategia y armamento de alto calibre (…) Por eso, es urgente revisar todos nuestros procesos, porque seguramente algo no estamos haciendo bien, a pesar de contar con el armamento, personal, recursos, inteligencia, valor y la determinación de cientos de miles de militares y policías, incluyendo a civiles, que siempre están dispuestos a dar su vida por el país”, señaló en su columna publicada en un medio local.

El especialista considera que es imperativo designar a un responsable político que rediseñe la estrategia (tanto política como operativa), que controle los presupuestos, integre la información, distribuya la inteligencia y dirija las operaciones conjuntas de todos los sectores comprometidos, incluyendo la Inteligencia Nacional, para que se realicen acciones con un solo líder y estrategia.

Niega emboscada

Por su parte, el vocero del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas (CCFFAA), coronel Fernando Uribe, aclaró que los militares, que residían en Putis, fallecieron en un contexto de enfrentamiento contra “los delincuentes terroristas”.
“Esto no ha sido una emboscada, esto ha sido enfrentamiento entre las fuerzas del orden y los delincuentes terroristas producto de una operación planeada y ejecutada con anterioridad para luchar contra el tráfico ilícito de drogas”, manifestó.

Por Martín Rodríguez

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